Coherencia – Acidez en Cápsulas

Hablemos de coherencia…

Uno de los peores errores del ser humano, en mi opinión, es no lograr un match entre lo que predica y lo que practica.

A lo largo de mi vida he visto cómo muchas veces, muchas personas pretenden que otros actúen de cierta forma, cuando ellos mismo no son capaces de tener coherencia entre su discurso y sus acciones.

Recientemente me enfrenté a uno de esos casos y la verdad el mismo deja mucho que desear. Una persona que se autodenomina “intachable”, “profesional” y hasta “esforzada”, perdió los estribos a tal punto de permitir que las emociones controlaran por completo sus acciones.

¿Por qué ocurre esto? Desde mi perspectiva, porque muchas veces no se sabe lidiar con el propio ego ni con la realidad de que otros a nuestro alrededor pueden ser igual de buenos o incluso mejores que nosotros mismos.

Desde que gestiono comunidades digitales, esta conducta suele ser “el pan nuestro de cada día”, muchas de las personas buscan destacar por encima de las demás a toda costa y esto sin duda solo atrae problemas.

He visto gente brillante que parece no conectar su cerebro con su lengua y termina actuando de manera incoherente en distintas situaciones, y es ahí cuando para mi esa gente pierde valor.

A veces es difícil comprender que personas que uno admira o de las que siempre has oído hablar de manera positiva se presenten con su “chorro e’ baba” y se caigan del lugar en las que uno las tenía colocadas.

Me he topado con gente que exuda seguridad detrás de un teclado y una pantalla y en “la vida real” no son más que unos inseguros de m…

También se da el caso de quienes parecen tener todo bajo control y al final resultan ser solo unos déspotas a los que la gente les obedece por miedo y no por respeto, creo que este caso es el más patético, porque además de ser ellos los que emanan incoherencia a diestra y siniestra, son capaces de arrastrar con ellos a seres carentes de voluntad y personalidad.

Soy de las que pienso que una vez que te expones en algún tipo de medio, ya dejas de ser esa persona “invisible” y te conviertes en todo un personaje público, y esto debe hacerte entender que no es normal que actúes de diversas maneras para engañar con tu traje de oveja a quienes te admiran y que en algún punto, casi nunca agradable, terminan dándose cuenta del tremendo lobo feroz que puedes llegar a ser.

Sin duda alguna que no hay mejor modo de vivir la vida que siendo auténtico, al final todos somos seres humanos que nos equivocamos, sentimos, padecemos y tenemos la capacidad de rectificar ante nuestras equivocaciones.

Así que para lograr aceptación, si es eso lo que buscas, no hay mejor cosa que presentarse ante todos tal cual somos, sin caretas, sin necesidad de aparentar lo que no somos en realidad.

Mi consejo: recuerda que entre cielo y tierra no hay nada oculto, y cuando la carga de fingir sea muy pesada, serán tus peores acciones las que te dejen en evidencia ante los demás.